AUBERGE DES MUSEES (CARCASSONE, FRANCIA)

Auberge Des Musees (Carcassonne, Francia), 12 de Abril 2014

Comer de rancho a la francesa

L'Auberge des Musées

17 Rue du Grand Puits

11000 Carcassonne-Francia

TF.+33 4 68 26 94 40

Valoración: 2/5

Puntos fuertes: Amplio zona de terraza/Ubicado dentro de la ciudad medieval/Bonito comedor interior

Puntos débiles: Carta simple y comida de rancho/Servicio lento y que no se entera/Se les nota que sólo quieren hacer negocio

Valoración Tripadvisor: 2/5 (49 opiniones)

Punto final y desastroso a nuestro viaje turístico-gastronómico en la ciudad de Carcassone. Finalmente acabamos en L'AUBERGE DES MUSEES, un tugurio para tomar el pelo a los turistas sirviendo comida de rancho a precios engañosos. Un sitio donde se les nota que llevan la caja registradora entre ceja y ceja, lo importante es hacer negocio a costa de los turistas y la calidad de la comida es lo de menos. Tenía fijados otros objetivos ese día (L'ESCARGOT, BAR A VINS, ADELAIDE), pero pasé de todo y me dejé llevar.

Otro restaurante con un bonito envoltorio, pero sin contenido gastronómico. Muy bonito por dentro y con una extensa zona de jardín para poder disfrutar de una comida al aire libre, pero el problema es que no tienen comida de nivel para poder disfrutarla. 

De entrada hay que decir que saben venderse muy bien, colocando a una amable señorita en la entrada exterior con un bonito vestido medieval y con un plato de la dichosa CASSOULET MAISON bien a la vista, el plato entra bien por la vista, pero luego le cuesta bajar por la garganta. En el grupo había un niño celíaco y nos vendieron la moto de que tenían disponible alimentos para este tipo alergia, en realidad era una simple bola comercial. Cuando comentamos este tema a la primera camarera que nos atendió, se quedó pálida y sólo se le ocurrió decir que lo iba a preguntar al chef; no supimos más de ella. Preguntamos lo mismo a un segundo camarero y la respuesta volvió a ser la misma, éste sí que apareció y nos dijo que podían ofrecernos pescado o una ensalada para este caso. Conclusión, la chica de la entrada habla más de la cuenta y sólo quiere conseguir a toda costa que entres en el local.

La carta bien pocos comentarios merece, simple y aburrida. Tomamos el menú caballero que tampoco era nada del otro mundo:

La CASSOULET es el plato especialidad de la casa y de esta zona por antonomasia. El ingrediente principal de este plato son las judías blancas que se cuecen a fuego lento con verduras, grasa de pato y poca agua en una cazuela de barro; después se añaden otros complementos como costillas de cerdo/tocino/salchichas de Toulouse/pato confitado. En nuestro caso la sirvieron con una salchicha de Toulouse "supuestamente" y confit de pato. Plato típico del sur de Francia en las regiones de Languedoc y Midi-Pyréneés en la Occitania francesa. Plato principal en las ciudades de Toulouse, Carcassone y Castelnaudary cada una con su variedad autóctona y una rivalidad ancestral en cuanto a atribuirse el origen de este plato. 

Vayamos rápido con el contenido del menú que tampoco merece que le dediquemos excesivo tiempo:

DE PRIMERO ENSALADA DE QUESO CALIENTE DE CABRA. Para empezar no estaba caliente cuando me la sirvieron. El queso era corriente de batalla, ninguna variedad especial de la zona. Resumiendo, una ensalada como la que puedes preparar en tu casa, incluso tú la puedes hacer más elaborada.

DE SEGUNDO LA CASSOULET. No encontré las verduras de acompañamiento, servida sólo con una salchicha y un muslito de pato. El sabor no está mal sin ser nada del otro mundo, pero es un plato muy seco y de difícil paso por la garganta. Pierde siempre en cualquier comparación con una buena fabada o cocido castellano de cualquier tipo. Creo que la cassoulet que nos sirvieron era la versión de calidad turista tirando a mala.

DE POSTRE SURTIDO DE QUESOS. Nada a destacar de los 3 quesos probados, muy flojos de sabor.

Cumplimos el trámite de llenar el estómago+probar la CASSOULET y aquí se acabó todo. Un sitio para no volver ya que no tiene nada especial. Hay mejores opciones dentro de la ciudad medieval, la mayoría son los restaurantes más pequeños y escondidos.